El modelo de trabajo híbrido busca mediar los beneficios y desventajas de los dos modelos más conocidos: presencial y remoto. En este modelo, los trabajadores pasan un porcentaje de tiempo en su centro de trabajo y otro tanto en su oficina en casa, dependiendo de los acuerdos y políticas de cada empresa, una forma de trabajo que demanda colaboración real y seguridad entre equipos de colaboradores.